top of page

La velocidad del ruletista



Mircea Cărtărescu es uno de los narradores rumanos más importantes del momento. Su obra es poco conocida en español pero quizá un cuentito pueda ser la entrada perfecta para conocerlo más.




Cuando hablamos de los ciudadanos del mundo, de los migrantes de remo y balsa y, sobre todo, de los migrantes letrados que se descubren siendo traducidos a otras lenguas, el escenario de migración cultural debe afectarnos como lectores en más de un sentido. Mircea Cărtărescu (Bucarest, 1956) padece esta distancia de migrante letrado y, con la humildad que haga falta, quisiera que nos acercáramos a su cuento breve: El Ruletista. La palabra es sonora, casi mágica, y ciertamente no puedo imaginar cómo sonaría en rumano, idioma en el que fue concebida esta narración breve.


En la historia de El Ruletista nos encontramos con un narrador afiebrado, presuroso y arrebatado porque, ya sea como personaje ficticio o como persona, se sabe al límite de sus días y “cualquier perspectiva es preferible a la de desaparecer para siempre”. Así, con una visión intelectualista y casi asfixiante, el narrador nos relata la vida de un hombre dedicado a las apuestas mediante el juego de la ruleta. Juego que, para los menos iniciados, trata sobre apostar si un hombre sobrevivirá al disparo de una pistola cargada a medio camino. Si bien existen muchos ruletistas, la historia solo trata sobre uno en particular: el “Ruletista”; “cuya vida es la demostración matemática de un orden en el que ya nadie cree o en el que cree tan solo porque es absurdo”.


El Ruletista es un hombre que la sociedad ha descartado: un exconvicto que no tiene cómo reinsertarse en la sociedad. Por esta razón, el protagonista de la historia debe encontrar una razón para vivir en la sociedad y pese a ella. Este absurdo de la vida moderna se enmarca en el juego de la ruleta, el cual se dota de una “grandeza teológica” porque, tras cada partida, se logra demostrar que el protagonista ha esquivado “aquello que supera nuestra pobre condición”.


Un aspecto moderno de El Ruletista son las breves, pero constantes, alusiones a Dios como un ser absolutamente mental, se trata de una idea, una razón que acompaña la vida de alguien en busca del sentido: “El cerebro humano, la única sustancia verdaderamente divina, el oro químico donde se encuentra todo”. Pero, si se tratara de superar únicamente una idea, la historia podría haberse resuelto fácilmente. El narrador de El Ruletista reconoce que la soberbia del protagonista, proyección de la suya misma, se enfrasca en un problema aún más complejo: “Que el yo, puesto que existe, debe encontrar una forma de asegurar su permanencia”.


El Ruletista tiene los aspectos transversales de la obra de Cărtărescu: los sueños, la angustia moderna y la profunda reflexión de la literatura como un mundo desprovisto de fronteras donde el lector puede engañar a su propia vida. Esto lo hace con espejismos, no es la vida de nuestras menudencias, es la vida de lo que moviliza nuestras pequeñeces. La literatura de Cărtărescu se vive como una confesión de vida, es teratología porque, inexorablemente, es una imagen en movimiento que se desencadenada “en el espejo de las páginas” y “se escurre en todas las direcciones como si fuera azogue”. Esto nos habla de cuán fútilmente creemos saber quiénes somos realmente y cuán vanamente nos confiamos en la representación de esta idea.


En un mundo con débiles fronteras idiomáticas nuestra forma de sentido y sensación de permanencia se encuentra en constante movimiento. El Ruletista nos muestra cómo la vida moderna es una forma de estabilidad más cercana al funambulismo que otra disciplina teológica. La narración breve de Cărtărescu logra mostrarnos cómo el sentido se diluye en lo narrado, llegando a rozar lo real, pero sin llegar a contenerlo. El error sería creer que la estabilidad es un bien aprehensible, más vale desplazarnos en equilibrio sobre ideas que convergen y se funden en constante devenir.




Mircea Cărtărescu nació en Bucarest en 1956. Es poeta, narrador y ensayista. Doctor en Literatura Rumana por la Facultad de Letras de la Universidad de Bucarest, está considerado el más importante escritor rumano de la actualidad. Sus textos más relevantes han sido traducidos a más de doce idiomas y destacan por su versatilidad formal.



 











0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Kommentare


bottom of page